Visita guiada al Pequeño Museo de Dublín
Acerca de esta actividad
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Lo más destacado
Descubre la historia reciente de Irlanda como nunca antes con una visita guiada al Pequeño Museo de Dublín, uno de los museos más queridos y sorprendentes de la ciudad. Ubicado en una elegante casa georgiana frente a St. Stephen’s Green, este museo ofrece una experiencia íntima y cercana que revela cómo era la vida en Dublín durante los últimos 100 años.
Acompañado por un guía experto, recorrerás salas llenas de objetos donados por los propios dublineses, cada uno con una historia fascinante que da vida al pasado de la ciudad.
- Explora un museo único con miles de objetos históricos donados por ciudadanos.
- Disfruta de una visita guiada llena de anécdotas, humor e historia local.
- Conoce de forma cercana la evolución cultural, social y política de Dublín.
Qué está incluido
- Entrada al Pequeño Museo de Dublín
- Visita guiada en inglés
- Acceso a las exposiciones permanentes y temporales
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Ten en cuenta que necesitas llegar 10 minutos antes de la salida
La experiencia en detalle
La visita guiada al Pequeño Museo de Dublín es una oportunidad perfecta para descubrir la vida cotidiana y los grandes momentos históricos de la ciudad desde una perspectiva humana, divertida y auténtica. Este peculiar museo, ubicado en un edificio georgiano bellamente conservado, alberga más de 5.000 objetos donados por los habitantes de Dublín, lo que lo convierte en una verdadera cápsula del tiempo.
Tu guía te acompañará por las diferentes salas del museo, explicando cómo estos objetos cotidianos, fotografías, documentos y recuerdos personales narran la transformación de Irlanda desde principios del siglo XX hasta nuestros días. Podrás aprender sobre momentos clave como el Levantamiento de 1916, el auge cultural de la ciudad, la llegada de la música pop irlandesa y la evolución del carácter dublinés.
La experiencia es dinámica y cercana, con guías que combinan historia, humor y storytelling para ofrecer un recorrido tan educativo como entretenido. Gracias a su tamaño reducido y a la proximidad con los objetos expuestos, la visita se siente íntima y auténtica, como si entraras en la casa de un dublinés que quiere contarte su vida y la de su ciudad.
Un plan perfecto para quienes buscan una experiencia cultural diferente, fácil de disfrutar y llena de curiosidades que no encontrarás en ningún libro.