16 jun
mar
•15:00
MetLife Stadium • Nueva York
22 jun
lun
•17:00
Lincoln Financial Field • Filadelfia
26 jun
vie
•15:00
Gillette Stadium • Boston
22 dic
lun
•19:30
Marrakech Stadium • Ouahat Sidi Brahim
26 dic
vie
•22:00
Adrar Stadium • Agadir
30 dic
mar
•0:30
Marrakech Stadium • Ouahat Sidi Brahim
11 jun
jue
•14:00
Estadio Azteca • Ciudad de México
18 jun
jue
•12:00
Mercedes-Benz Stadium • Atlanta
Posesión y presión dibujan un choque entre una de las grandes potencias del fútbol mundial y una selección africana en pleno crecimiento, con estilos casi opuestos pero igual de competitivos. El combinado galo aterriza con el peso de sus títulos de 1998 y 2018, además del reciente subcampeonato en Qatar 2022, apoyado en un juego técnico, paciente y demoledor en los metros finales. Enfrente aparece el conjunto campeón de África en 1996 y tercero en la Copa África 2023, que apuesta por un fútbol intenso, muy físico, de presión alta y transiciones vertiginosas. Ambos ya se cruzaron en dos Copas del Mundo: 3-0 para Francia en 1998 y 2-1 para Sudáfrica en 2010, un balance que alimenta una rivalidad en crecimiento. En una fase de grupos donde el cuadro europeo parte desde el top-3 del ranking FIFA y su adversario llega desde la zona media, cada punto se vive como una eliminatoria y ningún balón se discute a medio gas.
La vigente subcampeona del mundo en Qatar 2022 llega de rozar el título, liderada por un Kylian Mbappé que firmó 8 goles y se llevó la Bota de Oro. A su lado, Antoine Griezmann aporta jerarquía, lectura de juego y experiencia en las grandes citas. La escuadra del sur del continente, ausente en Qatar pero relanzada tras su tercer puesto continental, se sostiene en la seguridad bajo palos de Ronwen Williams y en el talento de Teboho Mokoena y Percy Tau, referentes de una generación que compite sin complejos. Este Francia–Sudáfrica de la fase de grupos está lejos de ser un partido más: enfrenta a una superpotencia consolidada con una selección en plena reivindicación. Compra tu boleto y sé testigo en directo de un nuevo capítulo mundialista, con estrellas, estilos opuestos y un ambiente que promete ser inolvidable.