Guía práctica para visitar el Guggenheim de Nueva York

Si te atreves a recorrer la rampa en espiral del Museo Guggenheim de Nueva York descubrirás una de las cumbres de la arquitectura del siglo XX. Esta institución, que se ha convertido en una parada obligada frente a Central Park, es capaz de unir arte, diseño, arquitectura y gastronomía. Sí, ¡también gastronomía!

Si ya estás convencido de subirte a bordo de este icono del diseño y del arte contemporáneo, y quieres deslumbrarte con las impresionantes obras de Van Gogh, Kandinski o Picasso, entre otros, te recomiendo que compres las entradas online y por adelantado para ahorrar tiempo y dinero. ¡Toma nota!

La mejor opción

Entradas para el Museo Guggenheim de Nueva York

Sáltate las colas para tener tu entrada prioritaria al Museo Guggenheim

No pierdas ni un minuto y disfruta de una experiencia más íntima visitando el museo con un guía todos los días a las 2PM.

Desde $36 en Hellotickets

Con esta opción estarás pagando por tu acceso prioritario al Museo Guggenheim, donde podrás contemplar miles de obras de arte moderno sin perder ni un segundo.

¿Cuál es la ventaja? Te ahorras interminables colas en la puerta del museo y solo te ocupas de disfrutar de la Gran Manzana. Si no sabes en qué invertir el resto del tiempo por la ciudad de los rascacielos, aquí te dejo la guía definitiva sobre las 33 cosas que hacer en Nueva York.

La entrada incluye:

• El acceso directo a las exposiciones temporales (sin colas ni esperas).
• Visitas guiadas a cargo de los educadores todos los días a las 14.00 h. Un recorrido por el museo que te ayudará a contextualizar las galerías a través de los ojos de un experto.
• La asistencia a conferencias de artistas y críticos de arte de todo el mundo.
• Clases de arte para adolescentes y adultos.

Asimismo, si te gusta pasear al aire libre, esta entrada prioritaria incluye un recorrido con un guía de 20 minutos por la Milla de los Museos en la Quinta Avenida, una zona que está repleta de instituciones culturales y joyas museísticas reunidas en poco más de kilómetro y medio.

Recomendado si... no dispones de mucho tiempo para visitar Nueva York o no quieres perder el tiempo en las insufribles colas que se forman todos los días para visitar el emblemático Guggenheim.

Nuria’s Traveller Tip

Lo mejor es que visites este museo por la mañana para que no te pierdas la interesante visita guiada incluida en el precio que hay a las 14h.

Lo más recomendado, como te he comentado, es comprar la entrada prioritaria a partir de 23 €. ¿Lo bueno? Tu reserva quedará confirmada de inmediato y además podrás, en caso de que te surja un contratiempo, cancelarlo gratuitamente para que reserves sin riesgo ni preocupaciones.

Evita que este viaje se convierta en tu peor pesadilla si llegas hasta aquí sin entradas y tienes que pasar por taquilla. Es uno de los museos más populares de la Gran Manzana, así que normalmente la cola es bastante larga, tanto que puede dar la vuelta al edificio, sobre todo en temporada alta (junio, julio y agosto y los meses de Navidad) y a primera hora de la mañana (abre a las 11 h).

¡Una curiosidad! Cuando el Museo Guggenheim abrió sus puertas en 1959, hace ya 62 años, el coste de la entrada fueron tan solo 50 centavos de dólar, lo que equivale a menos de un euro.

Benefíciate de los descuentos para jubilados y estudiantes

Sin embargo, si en tu caso, eres de los que prefieres ir por libre y no te importa perder la mañana o la tarde en una cola porque dispones de tiempo suficiente, fíjate a continuación en los colectivos que tienen acceso a una tarifa reducida:

• Mayores de 65 años,
• Personas con discapacidad
• Estudiantes, que deberán acreditarlo con la tarjeta universitaria correspondiente.
• Los menores de 12 años podrán pasar gratis. Sí, lo has leído bien: ¡gratis! Por lo tanto, este plan es muy económico si deseas viajar en familia y con niños pequeños.

¡Los más ahorradores también estáis de suerte! Un sábado al mes, la fundación permite a los visitantes entrar gratis al Museo Guggenheim de Nueva York, una iniciativa patrocinada por Macallan. Aunque, debido a las restricciones de aforo y a la alta demanda de estos pases, esta opción es bastante insegura. Por ello, y para que no te quedes sin tu entrada, te sugiero que la compres con tiempo en Hellotickets.

Lo bueno de Nueva York es que la oferta cultural es inmensa y hay opciones para todos los bolsillos. Algunas muy, muy económicas. No te pierdas este artículo sobre los mejores museos de Nueva York. Recuerda, además, que los sábados de 16h a 18h, el Museo Guggenheim permite la entrada a los visitantes a través de un donativo, con el que tú mismo decidirás lo que quieres pagar.

Si te preocupa el presupuesto a la hora de visitar los museos de Nueva York, debes saber que algunos como el MoMa también ofrecen franjas horarias gratuitas a determinadas horas de la semana y que los pases turísticos (consulta aquí cuál es la mejor tarjeta turística de Nueva York) también son una buena forma de ahorrar.

Nuria’s Traveller Tip

Te recomiendo que compres la entrada con la antelación suficiente puesto que suele haber una alta demanda. ¡No te quedes sin visitar este templo del arte!

Sí, al ser una ciudad tan turística y con tantas maravillas culturales que visitar, si no te quieres perder ninguna, puedes optar por comprar la tarjeta turística New York City Pass, que te servirá para entrar al Museo Guggenheim porque tiene las entradas incluidas en su precio.

Bajo mi punto de vista, es muy buena idea comprar este pase cuando dispones de varios días (al menos 9) porque te olvidarás de las aglomeraciones y de las colas. Así solo tienes que preocuparte de disfrutar. No te hará falta ni la guía de viajes porque las principales atracciones están incluidas en el precio y, además, ahorrarás dinero y tiempo.

Te lo recomiendo si vas a estar al menos una semana en Nueva York y quieres visitar los principales monumentos sin tener que hacer colas larguísimas ni gastar demasiado presupuesto.

El Guggenheim de Nueva York se encuentra ubicado en la 5ª avenida de Nueva York, entre las calles 88th y 89th.

A pesar de ser una de las ciudades más grandes del mundo, la ciudad de Nueva York está perfectamente conectada en transporte público. Para llegar al Museo Guggenheim puedes tomar las líneas del metro de Nueva York 4, 5 o 6. También puedes utilizar las líneas de autobús M1, M2, M3 o M4.

Por cierto, debes saber que el museo es accesible para personas con discapacidad: dispone de un ascensor y es accesible para personas en silla de ruedas, excepto en la sala High Gallery.

El Museo Guggenheim está abierto de jueves a martes de 11h a 18h. Mi consejo es que antes de ir, revises bien los horarios en la página web oficial, puesto que pueden sufrir cambios. Ojo, porque los martes y miércoles el museo cierra todo el día y algunos festivos (como el 25 de diciembre) también.

• Lunes: de 11:00 a 18:00 h
• Martes y miércoles: cerrado
• De jueves a domingo: de 11:00 a 18:00 h

Aquí te dejo una lista con las obras más icónicas de este museo:

• ‘Comedor en el jardín’, de Pierre Bonnard.
• ‘Montañas de Saint-Remy’, de van Gogh.
• La pieza mural ‘Painting’, de Joan Miró.
• ‘La mujer ante el espejo’, de Édouard Manet.
• ‘Composición 8’ y ‘Líneas negras’, de Wassily Kandinsky.
• ‘Red Lily Pads’, de Alexander Calder.

El foco principal del Museo Guggenheim, que cuenta también con sedes en Venecia, Bilbao y próximamente en la ciudad de Abu Dhabi, reside en el arte impresionista y expresionista de grandes figuras como Van Gogh y Kandinsky, así como en el arte moderno y contemporáneo.

En cuanto a sus principales pinturas, sus colecciones son de lo más variadas y espectaculares. Prepárate para este viaje visual de la mano de Toulouse-Lautrec, Magritte, Chagall o Miró, entre otros.

Como hemos visto, hay obras para todos los paladares. El museo combina las exposiciones permanentes con muestras temporales y con la colección de fotografías de Robert Mapplethorpe, célebre por sus imágenes de gran tamaño en blanco y negro, especialmente de flores y desnudos masculinos.

Intercambio de obras entre los Museos Guggenheim

Una de las características de los museos de la Fundación Guggenheim, la cual los convierte en únicos y diferentes, es que sus exposiciones son cambiantes, debido al intercambio de cuadros entre sus instituciones. La propia fundación defiende que este dinamismo contribuye a enriquecer la percepción artística del público y que lo puedas visitar más de una vez. ¡Así no te aburres!

La colección de Picasso en el Museo Guggenheim

¿Eres amante de la pintura española? Pues estate atento porque el Guggenheim de Nueva York dispone de una de las colecciones más grandes de Pablo Picasso, considerado como el pintor más influyente del siglo XX.

Entre ellas, destaca la obra “Mujer con cabello amarillo”, inspirada en Marie-Thérèse, a quien Picasso conoció cuando ella tenía 17 años y él 45. Ambos iniciaron una relación sentimental muy intensa, pero la ocultaron a su entorno durante años, puesto que ella era muy joven y el artista malagueño estaba casado. Posteriormente, el genio la convirtió en su musa y nos legó retratos de gran belleza como este.

Al menos necesitarás 2 horas para realizar la visita y recorrer las seis plantas serpenteantes que se elevan hacia la imponente cúpula de cristal en la que penetra la luz natural. La mejor hora para visitarlo suele ser, como es común en todas las atracciones turísticas, a primera o a última hora del día para evitar las grandes masificaciones y el aforo completo.

Por ello, lo mejor es que llegues con tiempo y planifiques tu viaje con antelación. Yo personalmente prefiero dedicar dos o tres horas a un recorrido tranquilo por el museo, antes que verlo entero, deprisa y corriendo en una hora. No obstante, esta decisión dependerá del tiempo del que dispongas.

Aprovecha los talleres para niños

El museo realiza diversas actividades para los más jóvenes. Por ejemplo, el segundo domingo de cada mes, el museo desarrolla un recorrido interactivo para las familias, que incluye actividades creativas y prácticas en las galerías.

Nuria’s Traveller Tip

Las vistas desde la parte superior del edificio son increíbles. No olvides tomar un selfie en el sexto piso antes de marchar. ¡Serás la envidia en tus redes sociales!

Cualquier época del año es perfecta para dejarse seducir por el Museo Guggenheim en Nueva York. Sin embargo, visitar este enclave en invierno es una actividad ideal para refugiarnos del frío y empaparnos de su cultura.

Las Navidades en Nueva York son mágicas, ¿quién no ha soñado alguna vez con despedir el año aquí? Un plan perfecto es visitar el museo por la mañana y por la tarde perderse en Central Park o por las calles de la Gran Manzana viendo sus luces de Navidad.

No nos podemos olvidar del maravilloso otoño y de las postales de ensueño que nos deja Central Park con las hojas de los árboles llenas de colores. Una bella estampa que podemos fotografiar nada más salir del Museo Guggenheim.

Por otro lado, el Museo Guggenheim es idóneo en verano para ponerse a cubierto del sol y tomar un poquito de sombra, mientras disfrutamos del arte. En conclusión, cualquier mes es recomendable para visitar esta instalación en Nueva York.

Nuria’s Traveller Tip

En invierno en Nueva York hace mucho frío, sin embargo, en los museos hace muy buena temperatura.. Mi consejo es que te vistas con muchas capas de quita y pon, como si fueras una cebolla. ¡Lo agradecerás!

Esta construcción cilíndrica fue diseñada por Frank Lloyd Wright y concebida como un “templo del espíritu” y del arte. Desafortunadamente, Lloyd no pudo ver terminada su obra, que se inauguró en 1959, meses después de su fallecimiento.

En esta visita, te sumergirás en la arquitectura de vanguardia del siglo XX y contemplarás algunas de las más bellas obras de arte contemporáneo. El edificio Guggenheim está construido de 700 toneladas de acero y 198 metros cuadrados de hormigón. ¡Casi nada!

En 2019 el monumental edificio fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. ¿Sabías que este genio de la arquitectura tardó casi 15 años y 700 bocetos en crear esta maravilla?

Eso sí, si después de una larga mañana paseando por la exhibición, en la cual habrás quemado un sinfín calorías, te entra el hambre, te recomiendo que hagas una paradita para deleitarte con la comida rápida por excelencia de EE. UU.: los perritos calientes y las hamburguesas y así reponer energía. Te lo cuento todo aquí: los 10 mejores sitios donde comer en Nueva York.

¡Buen provecho gastronómico y cultural!